La entrada de hoy, además de ser mucho mas extensa de lo habitual, no va a tratar en absoluto de póker, solo y exclusivamente va a ser un homenaje a mi tierra de adopción, Málaga, la ciudad en la que conocí a mi mujer y vio nacer a mis hijos.
Hablar de la feria de Málaga es hablar de la feria de todos, nadie pone ningún cartel que prohíba la entrada de nadie, todo es para todos y el único posible problema es el espacio, pero con el esfuerzo de todos, se consigue una atmosfera festiva inigualable, en mi opinión, a nivel mundial.
Casi 600.000 almas residentes en Málaga, prepara con ahínco una semana memorable, que perdura en el recuerdo de todos los que por allí pasan, aunque solo sean unos días a lo largo de su vida, pero resulta un recuerdo imborrable y duradero en tiempo.
Este fue el ambiente que me encontré en la popular Plaza de la Constitución al llegar al centro de la ciudad. Esta plaza, además de ser el centro neurálgico de la ciudad y todos sus grandes eventos, vera este año como, gracias al espectacular equipo de futbol, se llenara en mas de una ocasión.
No sabría decir cuanta gente me encontré por el camino, lo que si puedo recordad nítidamente es que para pasar de la Calle Compañía desde donde esta hecha esta fotografía, hasta poder llegar a la Calle Larios, me llevo algo mas de 20 min. La distancia no supera los 50 metros, por lo que os podéis hacer una idea de ¿Como estaba la plaza? ¡Abarrotà!
Una vez llegamos a la Calle Larios, todo cambia, puedes ver como de cada callejón del centro de Málaga esta lleno de gente que canta sevillanas, verdiales, bebe vinito dulce de Málaga. jalea a los bailaores, toca la guitarra, las cañas, el violín, la caja, un sin fin de personas que conforman una gran fiesta permanente en el centro de Málaga, desde mediodía, hasta bien entrada la tarde.
La primera instantánea corresponde a mi desembarco en la Calle Larios, como podéis ver, caminar no era tarea sencilla, pero no puedo decir que fuese una sensación desagradable, porque al ir tan despacio, te daba tiempo a ver a todo el mundo, gente que canta, que baila, que ríe e incluso que llora. Mirar un callejón del centro de Málaga y ver como un grupo de gente baila al ritmo de algún grupo improvisado de gente que pasaba por allí con una guitarra y que, como no, lo han puesto a disposición del publico, como se disponen a tocar y su recompensa es un grupo de mas de 100 personas jaleando y bailando a si ritmo, y su premio un vaso bien frio de alguna bebida espirituosa que hará que el recuerdo sea imborrable
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Encaramos la parte final de la Calle Larios y nos disponemos a llegar a la Plaza de la Marina, otro lugar de culto en esta feria de Málaga, aunque en este punto no quiero describir mas fiestas, quiero dejar claro que cuando una ciudad, grande o chica, se dispone a recibir a tanta gente y quiere hacer las cosas bien, hace las cosas como las hacen en esta ciudad, de manera cívica, ordenada y limpia.
Puede parecer una tontería, pero el hecho de ver una papelera como esta cada 25 metros en el centro de Málaga, me hizo pensar en lo bien organizado que estaba todo esto, porque no solo las papeleras, sino el hecho de ver mas de una patrulla de limpieza atravesando el centro de la ciudad y dejando limpia la ciudad a su paso.
Como ultimo apunte, antes de pasar la parte nocturna de esta feria, porque esto es solo la mitad de un día repleto de emociones, dejo unas instantáneas de algunos callejones del centro de Málaga y de un grupo que me encontré tocando cerca de la Plaza de Uncibay, otro lugar que daría para ríos de tinta, pero del que pasare de puntillas.
Tras la visita al centro de Málaga, toca paseo hasta casa, ducha, siesta y paseo hasta el Real de La Feria de Málaga, instalado en el Cortijo de Torres, un lugar inmenso, capaz de cansar a los carteros de New York y que con la cantidad de gente que tenemos a nuestro alrededor se hace entretenido, pero te deja realmente cansado tras una noche de fiesta.
Como diría Jack el destripador, vayamos por partes. Si llegamos al Real de la Feria y esta puerta de entrada no nos dice que nos vamos a encontrar con la juerga mas grande jamás contada, es mejor que nos demos la vuelta y nos volvamos a casa, de lo contrario, no haremos mas que cansarnos y tocar lo que no suena a nuestra compañía.
Esta es la antesala de un lugar que lo tiene todo, música flamenca para quien lo quiera, música actual, pop, rock, disco, y como no, hasta el típico feriante que narra los sucesos en la olla, si, con la señora que se ha soltado de la barra y esta desternillándose de risa por no llorar y el feriante cabron que no deja de menear el cacharrito para que la señora no se pueda incorporar, que espectáculo.
Uno de los accesos a la feria, el mas cercano al polígono industrial San Luis, nos deja una clara muestra de lo que es el Real de la Feria en pleno apogeo, capaz de reunir a tanta gente, que yo, me siento incapaz de aproximar una cifra, aunque lo justo es decir que de noche, al contrario que en el centro, caminar no se hace tan difícil, pero siendo justos, creo que a estas horas, hay mucha mas gente de Feria.
La zona de inventos para vomitar no deja dudas, aquí también puedes pasar un rato divertido si quieres, en mi caso, solo pasé cerca, pero no hice uso de estas maquinas de vomito masivo, entre otras cosas, porque llegue tarde y lo que tenia era hambre y claro, para cenar en un sitio tan apoteósico, necesitas tirar de costumbres locales, gastronomía autóctona no de la ciudad, sino de la propia semana de feria.
La hamburguesa ocasional es algo que se encuentra en cualquier lugar de el mundo, pero el campero, eso es otra cosa, es un bocadillo que tiene adeptos incondicionales como mi mujer, yo soy mas partidario de una hamburguesa triple XL con todo, hasta un lechal bien asado si entrase, pero volviendo al campero, es un bocadillo de pan redondo, del tamaño de un plato pequeño, para haceros una idea y relleno de jamón cocido, tomate natural a rodajas, queso, lechuga y salsas a elegir. Partiendo de esta base, el campero tiene su variable, empezando por el pollo y terminando por donde tu imaginación te lleve.
El maíz dulce es otra de las típicas comidas de la semana de feria en Málaga y consiste en la simpleza siguiente, mazorca de maíz asada y a dar bocados por toda la feria, eso si, aconsejo llevar hilo dental, porque si algo tienen estas mazorcas, es la cantidad de restos que deja en nuestra dentadura.
¿Unos churros? ¿Buñuelos? o ¿Helados?, pocas cosas tan típicas de las ferias como estos artículos de primera necesidad, aunque eso si, los churros que podemos encontrar en las ferias son como la mujer barbuda, solo podemos verlos en tiempos de feria, aunque tengamos excepciones, sobre todo de las mujeres.
A pesar de toda esta variada gastronomía, me decante por comer algo diferente, algo que en mi tierra no encuentro, no porque sea de difícil consecución, sino por una cuestión de costumbres. Me comí una “Papa Asá”, o lo que es lo mismo, una pata asada, que además de abierta al media, hacerse casi puré a base de pasar el cuchillo hábil y diestro de la persona encargada de prepararla, le añades sal, pimienta y una mayonesa bastante liquida y a continuación, le añadimos peso, cada uno a su gusto, pero en cantidad industrial, de manera que el peso especifico de la susodicha pieza ronde el kilo fácil.
Yo tengo por costumbre agregarle de todo, como no y eso supone un añadido de aceitunas, atún, maíz, jamón cocido, zanahoria, remolacha, palitos de mar y algunas cosas que me dejare en la memoria, sobre todo, porque la feria de Málaga, toca mucho la memoria a corto plazo.
El aspecto de la patata no es el mas adecuado, pero cuando las pruebas….
Antes de dar por terminada esta entrada, dejo unas fotos de iluminación y atrezo del Real de la Feria, con especial ilusión dejo la fotografía de una fuente en forma de diente de león que me dejo completamente fascinado y como no, os deseo que tengáis la suerte de poder acudir algún día a esta maravillosa feria.
Para los jinetes. Si habéis llegado hasta aquí, antes de nada sorprenderme de vuestra audacia y persistencia, pero no era esto lo que os quería dedicar. Querría haber puesto muchas fotos de tías buenas, que no hubo problemas en ver a un buen montón de mujeres bonitas, pero siendo sincero, ¿Cuantas entradas necesitaría para hacer justicia?¿Por las rubias y no las morenas? En fin, que para no dejar a ninguna mujer en mal lugar, prefiero que imaginéis vosotros, que eso es mas fácil.
